sábado, 4 de febrero de 2012

LAS ENFERMEDADES DEL ESPIRITU.

Así que, amados, ya que tenemos tales promesas, limpiémonos de toda impureza de cuerpo y de espíritu, perfeccionando la santidad en el temor de Dios.2 Corintios 7:1 INTRODUCCION: Dios llama a la Iglesia a vivir en santidad, apartada para El, manteniendo nuestro espíritu, alma y cuerpo irreprensibles para su venida (1 Ts. 5:23). El hecho de que el Señor nos indique que nuestro ser integral sea hallado irreprensible es porque puede contaminarse. Para evitar que una contaminación se convierta en enfermedad, debemos despojamos de todo peso y pecado que tan fácilmente nos envuelve (He. 12:1). DESARROLLO: Enfermedad es cualquier estado donde haya un deterioro de la salud del organismo humano. (E. Encarta 2004). Son varias las razones por las que una persona se enferma, por ejemplo: Descuido, pecado, ancestros, para la gloria de Dios (Jn. 9.1), etc., al igual que el cuerpo, el alma y el espíritu humano pueden enfermarse, las razones son varias, por lo que debemos evaluar lo que ha sucedido en nuestra vida que pudo afectar nuestro espíritu, para buscar la medicina que nos permita recuperar la salud espiritual, veamos algunos ejemplos: 1. AMARGURA DE ESPÍRITU, Génesis 26:34-35 RVA: Amargura se deriva de la raíz hebrea Marar que significa: Gotear, ser amargo, enfurecer, afligir, amargura, causar y rebelde. Esta es una enfermedad bastante común en los cristianos, puede iniciar cuando se deja de alcanzar la gracia de Dios y entonces brota una raíz de amargura que estorba la comunión con El Señor (He.12:15). También el alma puede amargarse, como Noemí (Rut 1:13), hasta afectar el espíritu. La decisión de Esaú de casarse con Judit y Basemat, hijas de los heteos, trajeron como consecuencia amargura de espíritu para Isaac y Rebeca, debido a que esa decisión violaba lo indicado por el Señor del y porque como consecuencia, se podía desviar hacia dioses ajenos y a fornicar en pos de ellos (Ex. 34:11-17; Dt. 7:1-4), lo que traería como consecuencia la ira de Dios {Jue. 3:5-8). La amargura de espíritu produjo depresión tan grande en Rebeca que llegó a fastidiarse de la vida. Llegó al extremo de declarar que si Jacob cometía el mismo error, seguir viviendo no tenía sentido (Gn. 27:46). Esa situación nos permite ver las graves consecuencias que producen las desobediencias de deshonrar a Dios y a sus padres pasando por alto la instrucción y la enseñanza (Pr. 17:25). 2. TRIBULACION DEL ESPÍRITU, 1 Samuel 1:15: Tribulación se traduce del hebreo Qasheh significa: Severo, ásperamente, atribular, difícil, obstinar, recio, violento y duro: La tribulación es una congoja o tormento. Dado que la amargura no fue eliminada del alma, se endurece el espíritu. Ana tenía rivalidad con Penina, quien la provocaba irritándola hasta el punto que ella prefería dejar de comer de lo sacrificado a Dios (1 S. 1:6-8). De Ana se menciona dos veces que Jehová había cerrado su matriz, lo que nos demuestra que ese era el propósito durante ese tiempo (Job 1:22). Cuando otros están fructificando y nosotros no, debemos analizarnos y recordar que todo tiene un tiempo, porque en el caso de Ana, Dios la estaba preparando para que cuando diera fruto, no tomara esa bendición como propia, sino que lo dedicara a El Señor y que aprendiera que las bendiciones de Dios no son objeto de competencia ni de jactancia sino de agradecimiento (1 S. 1:27-28). 3. ALTIVEZ DE ESPÍRITU, Proverbios 16:18: Altivez se traduce del hebreo Gobahh que significa: Euforia, arrogancia, altivez, altivo, altura y enaltecer. La altivez de espíritu es el resultado de tener un concepto más alto de sí mismo que el correcto (Ro. 12:3), ya sea por habilidades, talentos, las manifestaciones sobrenaturales o autoridad que es dada por Dios (Ez. 32:10). La altivez es la actitud previa a la caída, como Luzbel que quiso ser semejante a Dios y poner su trono en el monte santo (Is. 14:13-14). Eso es la consecuencia de problemas como un corazón altivo (Is. 9:9), rostro altivo como consecuencia de no buscar al Señor ni tener pensamientos hacia Él (Sal. 10:4), ojos altivos a consecuencia de levantarse contra Dios (Is. 37:23), animo altivo por su actitud origina contiendas (Pr. 28:25). a. Menosprecio hacia los demás, Ro.12:16: La persona altiva menosprecia a otras, incluso se siente mejor que las autoridades o que Dios mismo (Is. 37:23), como el rey Uzías que cuando se hizo fuerte su corazón se enalteció hasta corromperse actuando con infidelidad en contra de Jehová, pretendiendo usurpar el lugar de los sacerdotes (2 Cr. 26:16). b. Mirada altiva, Pr. 30:13: Se consideran mejor que los demás, caminan con el cuello erguido como las hijas de Jerusalén, por lo que fueron humilladas (Is. 3:16), son problemáticos (Pr. 28:25), se creen autosuficientes, poderosos, sabios, entendidos e ignoran que el castigo de Dios viene sobre ellos (Is. 10:12-14 LBLA). c. Tienen su confianza en las riquezas, 1 Ti. 6:17: Creen que las riquezas le dan valor a su vida. (Pr. 18:11), y piensan que no necesitan de nadie y de nada (Ap. 3:17). El apóstol Pablo recomienda que nadie debe tener un mayor concepto de si mismo (Ro. 12:3), sino que tengamos comunión unos con otros sin altivez (Ro. 12:16). 4. AFLICCIÓN DE ESPÍRITU, Eclesiastés 4:4: Aflicción del hebreo Re'uwth que significa: Molestia, mal trato y aflicción. En la Biblia aparece siete veces la aflicción de espíritu. Llega a una persona por medio del afán de probar de todo sin obtener satisfacción (Ecl. 2:11), esforzarse en trabajar para acumular riquezas y luego lo deja al que agrada al Señor (Ecl. 2:26), también puede llegar por tener envidia de otros y querer provocar a otros a que nos envidien (Ecl. 4:4). Cuando una persona hace todas sus obras completamente afanado, olvidando el reposo del Señor comienza en el círculo vicioso de querer obtener más cosas, acumular bienes como Lot, que en su afán de obtener más, decidió separarse de Abraham y colocó su residencia cada día más cerca de Sodoma, hasta que vivió allí, y como resultado perdió su familia, sus bienes y obtuvo contaminación y maldición en sus generaciones por medio de sus hijas (Gn. 13:12; 19:30). Cuando una persona está inconforme e insatisfecha con lo que posee olvida todo lo que posee y anhela tenerlo que otros tienen, como David que tenía muchas cosas (2 S. 12:8), pero su mirada estaba sobre Betsabé y al codiciarla pecó. 5. QUEBRANTAMIENTO DE ESPÓRITU, Proverbios 15:4: Quebrantamiento del hebreo Sheber que significa: Ruina, caída cautiverio, desfallecimiento, destrucción, herida, interpretación y quebranto. Antes del quebrantamiento viene la altivez de espíritu y en altivez de corazón (Pr. 16:18; 18:12), los pensamientos de la persona son solamente de iniquidad, sus caminos están llenos de destrucción y ruina (Is. 59:7). La persona que será quebrantada es insensible al dolor ajeno, no tiene compasión por nadie (Am. 6:6). Esa condición la padecen personas con una lengua mentirosa y los que solo son oidores de la Palabra (Stg. 1:22), inician mintiéndose a si mismos y luego a Dios, como Ananías y Safira (Hch. 5:3-4). Dios aborrece la mentira porque destruye la correcta comprensión de la realidad, la confianza entre los hombres, oscurece el entendimiento y conduce a la destrucción eterna (Ap. 21:8; 22:15), su castigo es inminente (Pr. 19:5). La persona mentirosa es llevada cautiva por sus mentiras porque llegará el momento en que se descubrirá la verdad, lo que le produce stress, a lo cual la Biblia dice "Huye el impío sin que ninguno lo persiga" (Pr. 28:1). 6. TRISTEZA DE ESPÍRITU, Isaías 54:6: Tristeza del hebreo atsab que significa: Pesar, triste, dañar, dolor, entristecer y herir. La tristeza trae consigo desanimo y depresión, así como alejamiento de la comunión con los demás, como le sucedió a Jacob cuando murió su esposa y se fue a vivir más allá de la torre de las ovejas descuidando su familia; fue en ese tiempo cuando Rubén se acostó con Bilha (Gn. 35:20-22). Podemos llegar a esta condición por varias razones, entre las que podemos mencionar: Abandono, olvido, desamor y desamparo, que pueden venir por causa del pecado (Sal. 31:9-10). Cuando El Señor se ha enojado con una persona y voltea de él su rostro (Is.54:7-8), la tristeza de espíritu puede consumirla, pero la misma redención del Señor le dará alegría y gozo perpetuo (Is. 35:10). 7. DESALIENTO DE ESPÍRITU, Isaías 61:3: Desaliento del hebreo Keheh que significa: Débil, angustiar, oscuro, embotado, torpe, pesadez y languidez. Generalmente esta palabra se usa con el propósito de señalar la mancha de la lepra en la piel del hombre (Lv. 13:6, 21), y para señalar el pabilo que humea (Is. 42:3). La mayor parte de las Biblia en español lo traducen como espíritu angustiado, y es la condición de una persona que ya no le queda aliento, está derrumbada y no tiene esperanza, como se llegó a sentir Job debido a la prueba (Job 6:2). La persona que se encuentra en esta condición es debido a que ha visto las circunstancias que le rodean mas grandes de lo que en realidad son, como el pueblo de Israel cuando escuchó el informe de los doce espías que fueron a la tierra de Canaán (Nm. 13:31-33; Dt. 1:28), las leyes de la guerra establecían que antes de iniciara la batalla los miedosos y pusilánimes tenían que regresarse para no contaminar a los demás guerreros (Dt. 20:8; Jue. 7:3). El cristiano que ha pecado y se siente acusado puede sentirse desalentado por considerar que no hay perdón para sus acciones y olvida que Dios es amplio en perdonar. Cuando las pruebas son por periodos de tiempo muy prolongadas, llega desaliento, por eso El Señor dice que el grano no se trilla por siempre (Is. 28:28). CONCLUSIÓN: Nuestro espíritu debe ser libre por medio de la misericordia de Dios que se ha manifestado todos los días de nuestra vida, para eso, se requiere una ministración efectiva que nos permita acercamos con toda confianza delante del trono de Dios, dejando a un lado nuestra propia voluntad y estar dispuestos a morir cada día para agradar al Señor. Si dejamos que Jesucristo nos de libertad, quebrante nuestro corazón, nos provea aceite y nos envuelva con su manto de alabanza, podremos cantar que grandes cosas ha hecho El Señor en nuestra vida (Is .61:1-2; Sal. 126:1).

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